La compañía LS9, tras haber modificado genéticamente unos organismos unicelulares, ha conseguido que excreten una sustancia muy parecida al petróleo.El procedimiento comienza con cepas no patógenas de E. coli, a las que modifican su material genético. Luego se las alimenta con maíz, caña de azúcar o astillas de madera, logrando que expulsen una sustancia diferente a la habitual.
El resultado es un aceite refinable que ya está prácticamente listo para su utilización en las estaciones de servicio. Pero ahí no queda todo, ya que el proceso de refinamiento emite menos CO2 del que absorben las materias primas durante su crecimiento, de esta forma se va retirando poco a poco CO2 de la atmósfera.
Parece que con este descubrimiento sólo existen ventajas, pero aún queda mucho para que comercialice este tipo de crudo. Una de las razones es la increíble cantidad de bacterias que harían falta para abastecer el mercado, ya que se necesita un tanque de fermentación de 1000 litros para producir un barril de crudo a la semana.
Aún así, parece que se están buscando alternativas, aunque siempre haya que esperar a que la situación se complique para conocerlas.
Fuente:Autoblog/en Español
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